Las más importantes cuevas de Cantabria se encuentran excavadas en calizas de época cretácica. Dentro de ellas el capitulo más importante lo constituyen los grandes sistemas kársticos formados en el paquete de calizas urgonianas de los valles del Miera y el Asón, así como las grandes cuevas formadas en los paquetes calcáreos de la zona costera occidental.
El otro gran conjunto de cavidades de la provincia se encuentra en los macizos calcáreos de la zona occidental, formados por Caliza de Montaña de época primaria, con su principal exponente en los macizos de los Picos de Europa, Peñarrubia, Lamasón, Rionansa y los valles de Liebana.
Junto a estos dos apartados principales hay un tercer capitulo al que se ha prestado una menor atención. Es el conjunto de cuevas excavadas en caliza de época jurásica. Estas cavidades se extienden por los valles centrales de Cantabria y forman las pocas cuevas que se conocen en los valles de los ríos
Saja, Besaya, Pas y Pisueña. También hay cuevas excavadas en estas calizas en los montes del valle medio del rio Nansa.
Una parte de los sistemas construidos en estas calizas son importantes resurgencias de enormes caudales que han llamado poderosamente la atención de los espeleólogos, como sucede en los casos de la Fuentona o en la cueva del Tio Marcelino, sin que hasta el momento se haya podido penetrar profundamente en las redes de galerías que alimentan estos grandes manantiales.
Otras cuevas han sido estudiadas de modo ocasional como ha sucedido en los casos de las cuevas de Hornucos o el Churrón, explorada por la S.E.S.S y aún pendiente de topografía.
Con todo, se está aún lejos de poder dar por concluido el trabajo de Catálogo de las cavidades formadas en este tipo de materiales, pues cuevas importantes como las de Lantueno, Valdeiguña, Cieza y otros lugares están pendientes, todavía, de un estudio mínimo, que ha de ser realizado globalmente, dentro de la empresa general de la Catalogación Provincial.
La S.E.S.S. es quizás el grupo que lleva la delantera en este trabajo,ya que ha estudiado, y continua aún, con el sistema de la Fuentona de Ruente; exploró completamente la cueva del Tio Marcelino, más tarde explorada y publicada por el Grupo Standard de Madrid. Más recientemente ha estudiado la cueva de Hornucos y las tres cavidades que a continuación se describen. En un futuro inmediato tiene prevista la exploración y topografía completas de las cuevas del Churrón, el Poyo y la Casa de la Vieja.
Las tres cavidades ahora publicadas son tres simas cercanas al pueblo de Aloños, descendidas y topografiadas en 1975 por un equipo de la S.E.S.S. formado por Teodoro Palacios, Candido Manzano y Juan C. Martinez Casares y el autor de estas lineas.
La más importante es la llamada Torca de Aloños, situada en el mismo centro del pueblo, junto a la iglesia. Es un sólo pozo de amplias dimensiones que finaliza en una pendiente de bloques que desciende hasta la máxima profundidad de -36 m. Por ella descienden las aguas de un pequeño regato que se sume en un embudo del fondo de la sima. Hay abundantes residuos sólidos procedentes del vertido de basuras por los habitantes de la localidad, debido a la carencia de un mínimo servicio de recogida.
Las otras dos son dos pequeñas simas de ll y l0 m. de profundidad respectivamente. Se encuentran situadas en un monte alejado del pueblo, por lo que están limpias de basuras y contaminación.
Es posible que las aguas captadas por la Torca de Aloños formen un pequeño sistema kårstico muy localizado,`que vertería sus aguas a alguno de los pequeños regatos que desde la ladera de Aloños descienden hasta unir sus aguas a las del rio Pisueña.
Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 1
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1981
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