domingo, 15 de diciembre de 2019

La Cuéva del Mar (C. de la Garma o del Calobro)



Historia: El nombre de Cueva del Mar le viene de la creencia, extendida en la zona, de que no tiene fondo y que llegahasta el mar, distante seis kilómetros en 
linea recta hasta la costa de Galizano.
Esta cueva fue visitada por la S.E. S.S. en agosto de 1962, conocida en la zona. Fue utilizada como refugio durante la guerra civil de 1936. 

También es conocida como cueva de la Garma o cueva del Calobro. La cueva  ha sido visitada en numerosas ocasiones por J. Colongues, R. Hernandez, T. Palacios, F. Canales, etc. Fue topografia el 20-8-75 por A. Pintó y M. Madrazo .

Situación: Se encuentra en Omoño (Ribamontán al Monte), en el monte Calobro. 

Para llegar a ella se puede tomar un camino de carros que hay en la curva del km. 9 de la carretera de Meruelo a Villaverde de Pontones. Este camino discurre a media ladera en dirección oeste entre la maleza del monte bajo, siguiéndole unos 200 m., encontramos la cueva a la derecha del camino a 7 m., entre la maleza al pie de un escarpe.

Descripción: La cueva tiene un desarrollo horizontal de 170 m.; la boca es de ámbito descendente.  A continuación encontramos una bifurcación con ramal ascendente al piso medio y descendente al piso inferior.

Siguiendo la rampa pedregosa del piso inferior, que es el mas frecuentado, llegamos al nivel más bajo, donde hay una cata excavada en el canchal. 

Desde aqui seguimos el ramal ascendente del piso inferior por un sendero tallado en el barro y coladas, enmarcado por el apilamiento de los materiales obtenidos al tallar peldaños; a los veinte metros se acaba este ramal.

El piso medio es de dificil acceso. Desde la anteriormente citada bifurcacion subimos la rampa y unas decenas de metros despues nos corta el paso una sima.

Se puede acceder al piso medio escalando la pared del piso inferior en su ramal ascendante.

Este piso medio presenta en su primer sector abundancia de coladas. En la zona media fuertes huellas de erosión y desdoblamiento vertical a dos niveles en zig-zag. También se aprecian importantes fenomenos de condensación de agua, que llega a resbalar por las paredes, dejando regueros sobre ellas. 

En la zona final, de abundantes fenómenos reconstructivos y clásticos tenemos la conexión con el piso inferior y la chimenea de acceso al piso superior. A éste se llega superando una chimenea. Este piso es de corto desarrollo, techo bajo y suelo de coladas.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982.

viernes, 15 de noviembre de 2019

Cueva de la Hacina (Ribamontan al Mar)


Cueva de la Hacina Se halla situada en el Poljé de El Calobro.

Una boca en ojiva de 2x3 m.baja en rampa hasta el enrejado de estrechas y altas galerias de 1x8 m. Por las que serpentean. un riachuelo. Este enrejado ocupa tres niveles, con diferencias de altura de hasta 12 m; existen aquí chimeneas obstruidas por bloque y derrubios. Se observa una alternancia de cslizas compactas, en la zona alta,  con otras más arcillosas y brechoides en la baja. Hay indicios de un periodo de colmatacion seguido de otro de Limpieza: huellas de erosión (marmi tas) a media altura colmatadas por colubiones de arcilla y caliza.

En la zona central de la cueva, el rio abandona el laberinto y  forma una galeria que será el eje del resto de la cueva, alta y estrecha, enforma de ocho, con restos de aluvión en la fase alta; las juntas de diaclasa originan aqui laterales de escasos desarrollo , abundando en ellas los desprendimientos de bloques y fugas en profundidad.

De esta galeria parten un nivel alto y otro bajo a la al tura de La chimenea que corta estructura de la cueva.

La cueva de la Hacina es el drenaje de la uvala del poljèe del Calobro en que se halla, recogiendo además otras aportaciones del campo de dolinas suprayacente. Apenas hay femómenos reconstructivos y abundan las huellas de antiguas colmataciones.

Referencia
Santander 1982
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología

martes, 15 de octubre de 2019

Torca del Palomar (Ruiloba)

Es la tercera cavidad del Sistema de Concha. Se accede a ella a través de un pequeno pozo formado por hundimiento.Consta de una única galería, fosil, de trazado sinuoso, orientada de norte a sur. Su desarrollo es de 250 m. Su morfologia interna aparece presidida por los fenómeno de reconstrucción. representados por abundantes coladas y estalactitas que se encuentran diseminadas en toda su longitud. Hacia la mitad del conducto hay una fuga en profundidad impenetrable, salvo en caso de desobstrucción.

En su fondo se iniciaba una galeria descendente no explorada. con una orientacion general noroeste.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982

sábado, 28 de septiembre de 2019

Sistema de la Cueva del Agua (Oreña, Alfoz de Lloredo)


Todo este sistema se encuentra en los materiales que ya describíamos en el estudio del Chaparral. Como recordatorio podemos resumir que se trata de materiales del Albiense Medio a Superior, representados por calizas y calcarenitas microcristalinas y cristalinas, estratificadas en bancos de 0,5 a 1 m. Este nivel tiene una potencia que oscila entre 30 y 40 m. y reposa sobre otro impermeable de arcillas, limos y areniscas del Albiense Inferior de entre 45 y 65 m. de potencia. Bajo éste encontramos los materiales del Gargasiense-Clansayense formados por calizas intensamente dolomitizadas. Sobre el Albiense Superior encontramos arenas y limos del Cenomaniense Inferior con una potencia de entre 60 y 80 m. Estos materiales afloran en este sector formando bandas de dirección aproximada SO-NE. El estrato en que se abre la Cueva del Agua presenta un buzamiento al SE de 28°. Los demás estratos buzan también al SE, pero su ubicación en el flanco de un sinclinal hace que su buzamiento varíe desde 31° para el Gargasiense-Clansayense en el pueblo de Oreña hasta 18° para el Cenomaniense en el desvío a Ubiarco de la carretera de Santillana a Oreña. (I.G.M.E. 1.986).


En el sector en estudio, las calizas del Albiense Medio a Superior, afloran en el flanco norte del cordal que separa los terrenos de Oreña (Alfoz de Lloredo). La parte superior de este cordal, que tiene la misma dirección que los estratos referidos, está formada por los materiales impermeables del Cenomaniense, y desciende hacia el norte en pendiente suave. A continuación, en la ladera norte encontramos las calizas del Albiense. En la zona de contacto entre estos materiales las aguas que proceden del nivel de limos se infiltran en las calizas y junto con las de lluvia que caen directamente sobre aquellas han dado origen a una gran cantidad de dolinas. El borde septentrional de las calizas, al que ya no llega el agua de escorrentía, tiene muchas menos forinas de disolución, y se mantiene a cotas más elevadas. Por tanto el afloramiento calcáreo aparece en la zona de contacto como una superficie ligeramente más hundida que el terreno circundante de la que el agua no puede salir por superficie. A continuación, siguiendo hacia el norte, están los limos del Albiense Inferior, que no aportan nada de agua al sistema, ya que la pendiente dirige las escorrentías hacia las calizas del Gargasiense - Clansayense, en las que se infiltran por diversos sumideros. Estos limos, si embargo, sirven de lecho impermeable a las calizas en que se abre la Cueva del Agua, y por la dirección y pendiente de su buzamiento, son los responsables de que todo el sistema de la Cueva del Agua tienda a evolucionar desplazándose hacia el SE a medida que se desarrolla en profundidad.


Queda pues claro que los aportes que llegan al sistema en estudio proceden en su totalidad de los campos de dolinas que se encuentran sobre la cueva, y que estos campos recogen tanto la lluvia caída directamente sobre las calizas, como la que llega por escorrentía de los limos situados sobre aquellas.

El encajonamiento de las calizas entre estratos impermeables, y la inclinación de la estratificación en la zona (28°) obligan a su vez a todos los aportes a converger en un caudal único, que es el río permanente del sistema, parte del cual surge por la boca llamada "Cueva del Agua". Este río ha circulado en el pasado por niveles superiores  que constituyen lo que llamamos, un tanto incorrectamente, pisos fósiles del sistema. Estos aparecen muy concrecionados y ya casi inactivos. Dada la inclinación de la estratificación, como ya hemos señalado, el agua al profundizar se desplaza hacia el SE, y cada piso se encuentra desplazado con respecto al anterior, y no en su vertical.


Actualmente, el piso activo accesible sufre pérdidas de caudal por diversos sumideros situados a lo largo de su recorrido, que alimentan un nivel inferior en desarrollo, totalmente inaccesible para nosotros. Este nivel aún debe tener una capacidad de drenaje pequeña, y por ello, una parte de las aguas siguen circulando por la galería activa que podemos recorrer. Esta galería, como sus "antepasadas" ya inactivas se desarrolla paralela a la dirección de los estratos, a favor de la confluencia de éstos con diaclasas de dirección SO-NE, aprovechando en algunas ocasiones otras perpendiculares a éstas en tramos de corto recorrido.

Las fracturas por las que avanza el cauce observable terminan por cortar la ladera del monte debido a la presencia de una valleja situada enfrente del pueblo de Oreña.


Referencias 
1.-José Luis Alonso Sánchez (2020): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2010 a 2020.

2.-Boletín Cántabro de Espeleología 13, 1997.

jueves, 15 de agosto de 2019

Cueva del Juanin (Ruiloba)


Se encuentra situada por encima de la cueva de Rupicos.

Abierta en el limite de un prado ubicado por encima de Rupicos, su boca se encontraba tapada por diversos bloques, que fueron removidos por Emilio Muñoz y otros miembros del C. A.E.A.P. , a los que debemos la noticia de la localización.

La cueva es una cavidad descendente, con un conducto estrecho abierto en favor del buzamiento de los estratos calcáreos . En su primer tramo, la galería presenta abundantes columnillas y formaciones litogénicas que obstaculizan el recorrido. La última partee de la cueva es de morfologia diferente, con predominio de los bloques y acumulaciones de arcilla de decalcificación, tanto en el suelo como en  las paredes. El de sarrollo de la cueva es muy pequeno, unos 26 m. en total.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982

viernes, 26 de julio de 2019

Avance al Catalogo de Cavidades de Alfoz de Lloredo (II)


Este catalogo pretende ser el segundo de una serie de publicaciones cuyo objetivo es ir dando a conocer y actualizar la información de los catálogos ya existentes del Término municipal de Alfoz de Lloredo, Publicando las cavidades ya conocidas y las nuevas, fruto de las exploraciones en el municipio. En el año 2009 se catalogaron un total de 104 cavidades, en la base de datos de la Federación Cántabra de Espeleología.

Información procedente de los Cuadernos de Espeleología,  Boletín Cántabro de Espeleología y otras publicaciones.

Relación de Cavidades

22.Hoyos 0
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 44 m.

23.Hoyos I
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 45 m.

24.Hoyos II
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 64 m.

25.Hoyos III
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 64 m.

26.Hoyos IV
Otros nombres: O de la Ojancana
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 56 m.

27.Hoyos V
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 50 m.

28.Hoyos VII
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 42 m.

29.Hoyos VIII
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 40 m.

30.Cuesta
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 53 m.

31.Cueva de Cueto Rubio Inferior 
Otros nombres: Cueto Rubio I
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 75 m.

32.Cueva de Cueto Rubio Superior 
Otros nombres: Cueto Rubio II o de la Virgen
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 80 m.

33.Hoyos XI (inédito)
Localización: Oreña
Tipo: Torca
Altitud: 55 m.

34.Hoyos XIII (inédito)
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 70 m.

35.Hoyos XIV (inédito)
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 71 m.

36.Hoyos XV (inédito)
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 79 m.

37.Hoyos XVI (inédito)
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 78 m.

38.Cachirula I
Otros nombres: o Abrigo de Ocejo
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 21 m.

39.Cachirula II
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 27 m.

40.Cualventi
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 82 m.

41.Cueva del Medio
Otros nombres: Enmedio
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 80 m.

42.Cueva de la Torre
Otros nombres: o de la Mina
Localización: Ciguenza
Tipo: Cueva
Altitud: 35 m.

Referencias 
1.-José Luis Alonso Sánchez (2020): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2010 a 2020.

2. Boletín Cántabro de Espeleología 12            Federación Cántabra de Espeleología 1996.

3. Boletín Cántabro de Espeleología 9                Federación Cántabra de Espeleología 1993.

4. Boletín Cántabro de Espeleología 8                Federación Cántabra de Espeleología 1985.

Catálogos
Avance al Catalogo de Cavidades de Alfoz de Lloredo (I)


viernes, 14 de junio de 2019

El Pozo Cuadrangular (Arredondo)


Sinonimos: Pozo Castin
Lugar: Peña Lavalle
Desnivel: -217 m.

Philippe Morverand

Descripción: Esta sima habia sido ya descendida por espeleólogos del S.E.G. del E.R.E., del S.I.S de Tarrasa y del Espeleo Clud de Gracia, en abril de 1979. La nueva topografia que presentamos da un desnives algo más pequeño de esta cavidad (-224 mts. segun los grupos catalanes).

Se trata de una sima muy vertical que se puede considerar como dos pozos de 130 y 76 mts. respectivamente, aunque las piedras que caen desde la boca bajan al mismo fondo. El primer pozo empieza a -10 mts. y es espléndido en su primer tramo. Luego se vuelve estrecho y se convierte en un canalillo muy expuesto a las caidas de piedras, resultando peligroso el bajarlo. Sin embargo, la fuerte corriente de aire que se aprecia en el fondo, deberia incitar a un club de la región de Santander a forzar el paso, ensanchando el trechamiento hasta donde actualmente se ha explorado la sima.

Referencias
1 Boletín Cántabro de Espeleología 7
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1986

2. Jose Leon Garcia. Cantabria Subterranea, Catalogo de las grandes cavidades 
Santander 1997.

domingo, 12 de mayo de 2019

El registro arqueológico del valle de Miera


Introducción

Los resultados que se ofrecen en este trabajo son parte de los obtenidos en el proyecto de investigación Prospección arqueológica de la Cuenca del Miera, autorizado por la Consejería de Cultura del Gobierno de Cantabria para el año 2008 y realizado por miembros de los grupos C.A.E.A.P. y G.E.I.S.
C/R - A. Bermejo, V. Crespo, C. Barredo y E. Muñoz, bajo la coordinación de J. Ruiz-. 

Nuestro grupo ya había llevado a cabo la prospección de este territorio, junto con la cuenca alta del Asón, pero hace ya casi treinta años. 

El estudio de los yacimientos arqueológicos de la cuenca del Miera forma parte de un proyecto de largo alcance que el grupo C.A.E.A.P. junto con el G.E.I.S. C/R, en colaboración con otros colectivos
Expedición Espeleológica a Matienzo, Grupo de Espeleología Tres Mares- está desarrollando desde hace unos quince años. Desde entonces se ha completado el estudio de los tres sectores del valle del Asón - alto, medio y bajo, el valle de Camargo, el valle de Piélagos y el registro del valle del Nansa. 

El área objeto de estudio comprende el alto valle del Miera – municipios de San Roque, Miera, parte de Ruesga y parte de Soba, el valle medio del Miera - municipios de Liérganes, Riotuerto y Entrambasaguas-, la comarca de Trasmiera municipios de Ribamontán al Monte, Medio Cudeyo,
parte de Solórzano y Ribamontán al Mar, el arco de la Bahía de Santander Astillero, Marina de Cudeyo y los valles de Penagos y Villaescusa, donde se encuentran los municipios del mismo nombre. Se trata de un área muy rica en yacimientos arqueológicos, aunque la mayor parte se
encuentra en los tramos bajos de la cuenca. 
Buena parte del volumen está formado por el catálogo de yacimientos, de los que el mayor número corresponde a estaciones en cueva. La importancia del registro arqueológico en cuevas en Cantabria
no deriva de una prospección diferencial ni de la relativa dificultad de localización de los hábitat al aire libre por la cobertera vegetal, sino sobre todo de la intensa degradación que las estaciones de superficie han sufrido por el clima oceánico de la zona durante el Holoceno. Las cuevas han funcionado así como auténticos “contenedores” de información arqueológica, por lo que su análisis detallado resulta fundamental para la reconstrucción del registro original. 
La metodología general de investigación, tanto en lo relativo a la forma de trabajo en el campo, como en lo que respecta al análisis de los datos, e incluso los formatos utilizados en la presentación de los yacimientos y de los materiales, son los mismos que en los trabajos anteriores, circunscritos al Asón y
al Nansa. 

Hemos querido que el estudio tenga un sentido acumulativo en la medida en que al disponer de los resultados de las demás cuencas estudiadas la interpretación de los diferentes tipos de estaciones y de
las series de materiales se hacen más completas. En el Miera las mismas facies de yacimientos representadas en el Asón o en el Nansa toman ciertas particularidades al ubicarse en un paisaje diferente con una distribución distinta de los espacios ocupables, una organización de los biotopos
peculiar y una oferta concreta de materias primas.

Los resultados obtenidos, como en los trabajos anteriores, tienen sólo carácter preliminar, dada la escasez de programas de estudio centrados en fases concretas, y esperamos que sirvan como base para
llevar a cabo estudios de detalle que vayan ayudando a conocer las formas de vida y las culturas de los habitantes de estas tierras. 

Referencia 
BAR International Series 2134 
2013

viernes, 19 de abril de 2019

Torca del Caracol (San Roque de Riomiera)


Situación: Se encuentra en el Collado del Mojón o Caracol (822 m), antes de llegar al Kilometro 10 de la CA-264 de San Roque de Rio Miera a Selaya.                                          

Una pista a la izquierda de la carretera pasa entre las Peñas del Mojón (856 m) y el Caracol (898 m) en dirección a los Picones de Sopeña, desde un refugio de ganado parte por la izquierda un sendero que asciende hacia unos afloramientos calizos, la torca se encuentra en el más alto sin llegar a la cumbre del Caracol.
                                                              
Descripción: Una rampa descendente nos sitúa en la cabecera del pozo de -11 metros, equipado con una cabecera de 2 spits, una vez en la base del pozo nos encontramos en una pequeña salita cubierta de bloques y de gran numero de huesos animales esparcidos, en este punto tenemos dos opciones seguir por la izquierda bajando entre bloques, llegamos a otra sala con un laminador de techo bajo.                                                                                                                        
A la red principal de galerías se accede por la derecha subiendo por una galería alta, después de hacer una fácil trepada, a los pocos metros llegamos a un resalte de -10 metros,  a la derecha comienza una galería desfondada con algunos pozos los cuales se comunican con la sala principal.                                                                                                                    
El resalte de -10 metros, es la mejor opción para descender a la sala principal, los cuatro primeros metros se pueden destrepar sin problemas  hasta llegar a una cabecera compuesta de un anclaje inviolable y un puente de roca, una vez en la sala nos encontramos dos zonas, a la derecha dos sumideros y dos galerías una de ellas  termina en una chimenea y la otra comienza en una rampa ascendente seguida de una galería de pequeñas dimensiones por donde se aprecia una corriente de aire y un curso de agua, esta termina colmatada a los 26 metros. Por la zona de la izquierda nos encontramos una zona de bloques y a un derrumbe al final. Cerca de derrumbe  situándonos en la pared izquierda podemos acceder entre bloques a una sala de techo bajo de 5X5.60 metros, esta termina colmatada por bloques y derrumbes.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 8
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1987

sábado, 23 de marzo de 2019

Cueva de los Calderones-Surgencia de la Covachona (Medio Cudeyo)


Descripciónentramos por una boca de 1 m de altura por 80 cm aproximadamente de anchura. Encontramos una pequeña subida de arcilla muy resbaladiza que deberemos ascender a gatas o cuclillas ya que el techo cada vez es más bajo. Una vez arriba encontraremos un pequeño plano en el cual observaremos una entrada (no accesible) a la derecha y a la izquierda un pequeño agujero de unos 40 cm. por el que deberemos bajar. Una vez abajo, tomaremos la única galería estrecha y muy baja, que nos conducirá dirección oeste durante unos metros hasta encontrarnos con una bajada muy pronunciada y resbaladiza en la que deberemos bajar asegurados con material de vertical. Una vez bajamos encontraremos un pozo seguido de otro con una pendiente extremadamente pronunciada (casi vertical) y que sería imposible de acceder por ellos sin rapelar. 


Estos dos pozos de 10 metros, convergen en un mismo punto parecido a un balcón a unos 3 metros del fondo de una sala bastante grande y con el fondo lleno de bloques de piedra. Una vez abajo del todo, tomamos inicialmente dirección izquierda (oeste) saltando sobre unos enormes bloques hasta llegar a un río subterráneo por el que seguimos el curso trepando por la pared durante algunos metros hasta que lo complicado del terreno y la falta de medios (neoprenos) nos impiden continuar aunque nos quedamos con las ganas de seguir. Volvemos bajo el antes mencionado “balcón” y tomamos la dirección contraria es decir, (este).Seguimos saltando entre bloques y seguimos la dirección del rió hasta llegar a un lago donde debemos abandonar la exploración, no sin antes percatarnos de que hay un rollo de cordel atado a la orilla del  lago.

Surgencia de la Covachona, nos ha sido imposible explorarla ya que en nuestra sección de espeleología, no contamos con ningún miembro que practique espeleobuceo, no obstante, según nuestras indagaciones, tenemos noticias de 1999, de la Sociedad Espeleológica Lenar (S.E.L.) se había adentrado en el interior de esta cueva sirviéndose de un cordel guía el cual, fue encontrado por nosotros al efectuar la exploración de la Cueva de los Calderones.                                                         

Referencia 
José Luis Alonso Sánchez (2010): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2002 a 2009.

Macizo de Peña Cabarga (Medio Cudeyo 2003-2020)


domingo, 10 de febrero de 2019

De Pesués a Pejanda: Arqueología de la Cuenca del Nansa (Cantabria, España)

Introducción 

El objetivo prioritario que el equipo de trabajo se marcó, tanto durante los trabajos de campo, como en las jornadas de estudio de materiales y datos, fue básicamente disfrutar con la investigación. Si de forma subsidiaria se ha conseguido aportar datos nuevos o llegar a algunas conclusiones sobre la adaptación humana a un paisaje concreto, ha sido un efecto colateral. 

Por otra parte disfrutar con una investigación de este tipo en un paisaje como el que ofrece aún el valle del Nansa, y con un grupo de amigos bien avenidos, no resulta difícil. Más difícil ha sido conseguir exponer la información obtenida de forma sistemática. 

En este trabajo se ha querido priorizar desde el principio la información arqueológica sobre los resultados derivados de su análisis. El valor de la información consiste en que, en gran medida, procede de yacimientos nuevos para la ciencia, conocidos gracias precisamente a este proyecto. 

La prospección de este territorio se ha llevado a cabo dentro de un proyecto de Revisión del Inventario Arqueológico de Cantabria, financiado por la Consejería de Cultural, Turismo y Deportes del Gobierno de Cantabria. 

El carácter de nuevas localizaciones de buena parte de las series conlleva que, en muchos casos sus series materiales son exiguas, bien porque están tan excelentemente conservados que sus restos casi no son visibles, bien porque su conservación es tan deficiente que sólo aparecen evidencias marginales, como por ejemplo muchos concheros mesolíticos, cuyos restos aparecen cementados en las paredes y techos de las cuevas. 

En relación con esa prioridad se ha reservado la mayor parte del espacio a ofrecer las fichas de yacimientos, junto a sus plantas y al dibujo o fotografía de sus materiales. En cuanto al análisis es muy sencillo en la mayor parte de las ocasiones. Para dotar al estudio de un marco de interpretación se ofrece en los primeros capítulos, un estudio del medio ambiente, en la medida en que será el interlocutor continuo de las culturas humanas, y de un estudio de la historiografía, es decir, del proceso de conocimiento, llevado a cabo desde comienzos del siglo pasado. 

Este libro es sólo un escalón más de un proyecto que los grupos G.E.I.S. C/R y C.A.E.A.P. llevan desarrollando desde hace un par de décadas. Como fruto de esta colaboración se ha sistematizado el registro arqueológico del valle de Camargo, Piélagos, Matienzo y del valle del Asón en su conjunto, además de la cuenca Nansa, presentada aquí. Actualmente se trabaja ya con la información disponible para estudiar el valle del Miera. Creemos que su principal aportación no será ciertamente divertir al lector, sino dejar impreso, con la mayor fidelidad posible, un registro cultural que, casi de forma milagrosa, ha llegado a nuestras manos y que nos habla, en el extraño lenguaje de las cosas, de la vida de la gente que ocupó nuestra Región antes que nosotros. 

Referencia 
BAR International Series 2134 
2010

martes, 8 de enero de 2019

Jesús Carballo García

Jesús Carballo García (Santiago de Compostela, provincia de La Coruña, 1874 - Santander, Cantabria, 1961), también conocido como Jesús Carvallo García y Jesús Carballo Taboada, nombres que utilizó en distintas ocasiones, fue un arqueólogo que desarrolló su principal actividad en Santander (Cantabria) a lo largo de más de medio siglo.

A su llegada a Santander le fue encomendada la dirección del nuevo colegio salesiano, que se encontraba aún en construcción. Fue el promotor en Santander de una delegación pretendía que fuera espeleológica inicialmente- de la Real Sociedad Española de Historia Natural y ostentaba ser el primero en España que utilizó esta terminología para llamar a la ciencia encargada de estudiar las cavidades naturales. En una comunicación presentada en 1908 en el Primer Congreso de Naturalistas Españoles de Zaragoza afirmaba que "En España, la Espeleología pasa desapercibida, a pesar del extraordinario incremento que va tomando en el extranjero, y apenas la conocen los que estudian obras francesas o alemanas. Nuestras geologías y diccionarios universales desconocen por completo esta palabra; por primera vez sonó este año en un artículo mío, publicado a este fin en el Boletín de la Real Sociedad Española de Marzo 1908 (...) El incremento extraordinario que en estos tiempos han tomado las Ciencias Naturales, nos obligó a dividir cada una de ellas en varios ramos, a fin de especificar y profundizar más las investigaciones. Así (...) la Geología, que hace un siglo se limitaba a un conjunto de puras hipótesis, abarca hoy tan vasto campo de acción, que se vio obligada a dividirse en Paleontología, Mineralogia, Estratigrafía y después en Sismología, Oceanografía, Vulcanografía, Hidrología, etc., formando cada una de éstas una nueva ciencia con sus necesarias subdivisiones. Y ahora el estudio de las cavernas adquiere tal desarrollo, que debe forzosamente separarse independiente de su madre la Geología. No debe confundirse con ésta, porque se limita al estudio completo de las cavernas sin que investigue el mar, ni los desiertos, ni los glaciales, ni los volcanes, como hace aquella. Otros la confunden con la Prehistoria, siendo cosa muy diversa, porque ésta se ocupa tan sólo de lo concerniente al hombre, mientras que la Espeleología comprende, además de esto, el estudio de los fenómenos hidrológicos, químicos, biológicos, etc., de las cavernas".

Una de sus principales aportaciones culturales fue la creación del actual Museo Regional de Prehistoria y Arqueología de Cantabria, inaugurado en 1926. Estudió diversas cuevas y yacimientos paleolíticos, protohistóricos y romanos, y algunos yacimientos paleontológicos del Cuaternario, principalmente de Cantabria. Son destacables sus actuaciones en la cueva de El Pendo (con el doctor Blas Larín) y en la ciudad romana de Julióbriga (con la colaboración de Larín y del arqueólogo y deportista Vicente Ruiz Argilés), ambas en Cantabria.