lunes, 18 de mayo de 2009

La Fuentona de Ruente



Resumen:
Se resumen y actualizan las intermitencias en la surgencia del sistema jur谩sico de La Fuentona, fen贸meno descrito como de "remota antig眉edad" y que a lo largo del Siglo XX hapermitido documentar una docena de paradas, que tienen lugar tanto en per铆odos de estiajecomo de avenidas. Se ha estimado que hayan podido llegar a 20 a lo largo de la centuria,incluyendo algunas no detectadas, ocurridas a lo largo de la noche. Este fen贸meno geol贸gico,catalogado de Inter茅s Geol贸gico Nacional por el IGME, ha merecido la candidatura a sertitular de las Fuentes Tam谩ricas descritas por Plinio en el Siglo I D.C., e inspirado abundantesleyendas populares, narraciones literarias, invitaciones al turismo y evocaciones po茅ticas desdetiempos antiguos hasta nuestros d铆as, manteniendo su inter茅s etno-geol贸gico. Con las aguas deesta cueva se movieron viejos batanes y molinos harineros, piscifactor铆as de trucha y una de las primeras centrales hidroel茅ctricas de Cantabria; hoy d铆a sigue siendo 煤til, surtiendo de agua potable a varias poblaciones de la cuenca del Saja.

Introduccion: En el a帽o 1991, ocasi贸n en que la Fuentona dej贸 de manar, se omiti贸 publicar la referenciapor la escasa aportaci贸n que supon铆a al recuento de las intermitencias registradas. La 煤ltimaparada de esta abundante fuente -m谩s podr铆ase llamar r铆o si juzg谩semos su caudal y olvid谩ramoslos pocos cientos de metros que recorre hasta abocar al Saja- que ha tenido lugar el mes de marzode 1996 me ha sugerido retomar ya de nuevo este fen贸meno hidrogeol贸gico y etnogr谩ficoexcepcional para actualizar la estad铆stica de paradas documentadas hasta el momento actual, y como resumen de lo publicado con anterioridad.El interesante fen贸meno, que ha dado fama y misterio a esta cavidad y al pueblo en que se asienta, consiste en que el manantial que en ella nace, con flujo regular que puede oscilar entrevarios metros c煤bicos por segundo en avenida y varios cientos en estiajes medios,repentinamente deja de manar por un tiempo que oscila entre algunos minutos y varias horas, yal cabo vuelven a surgir sus aguas con el mismo caudal anterior. Desde hace siglo y medio la Fuentona de Ruente ha sido puesta en relaci贸n con la Fuentes Tam谩ricas de las que Plinio describi贸 la intermitencia y la mala suerte que produc铆a el llegar a verlas y encontrarlas sin agua.La relaci贸n de los abundantes top贸nimos espa帽oles que contienen la expresi贸n "Tamar..." con corrientes de agua, algunas de ellas procedentes de fuentes intermitentes, nos hace pensar en laposibilidad de que los estudios sobre la cita del ge贸grafo romano no se deban dar por cerrados.Fuente inspiradora de argumentos literarios, son destacables por la belleza o construcci贸n los escritos de Manuel Llano -a la altura de toda su obra- y de Juan Sierra Pando.Su inter茅s espeleol贸gico se despert贸 a ra铆z de la larga parada que tuvo 1990, abord谩ndose su estudio desde la Secci贸n de Espeleolog铆a Sautuola de Santander y los equipos de estudiosos del entorno del Museo de Prehistoria y Arqueolog铆a de Santander.

Relacion de Ultimas Paradas: Con ocasi贸n de haber ocurrido un nuevo cap铆tulo en las intermitencias, a finales del inviernodel reci茅n concluido a帽o 1996, pareci贸 oportuno a帽adir a la escasa casu铆stica existente las nuevas ocasiones en que el manantial de Ruente se qued贸 sin agua. Hace esta 煤ltima el n煤mero doce delas documentadas o relatadas oralmente, por los vecinos, en lo que va de siglo, a cuatro a帽os desu final; es probable que el n煤mero sea, sin embargo superior, pues desde 1970 hemos registrado siete paradas, aunque sin perioricidad regular, que ofrecen una media aproximada de una paradacada siete a帽os; se ha comprobado, tanto por los seguimientos personales como por los art铆culosde prensa, que algunas ocasiones pasan desapercibidas y que en otros casos los vecinos olvidanlas fechas concretas, salvo cuando tienen varias horas de duraci贸n o se genera mayor animaci贸n en la pesca de truchas que quedan en seco sobre las piedras del cauce.El registrar y publicar en detalle todas las paradas se dirige a un objetivo sencillo ya abordadocon anterioridad, pero que necesita m谩s datos para su resoluci贸n: Correlacionar las paradas conlas incidencias meteorol贸gicas, tales como pluviometr铆a y puesta en carga de los acu铆feros, nievey desnieve, r茅gimen de vientos, etc. Si el fen贸meno de la intermitencia sigue manteni茅ndose y est谩 en relaci贸n con alguno de estos factores mencionados, se podr谩n dilucidar en el futuro lasinc贸gnitas que hoy se nos plantean en torno al curioso mecanismo de intermitencia deperiodicidad y duraci贸n caprichosas, as铆 como la cuenca de captaci贸n y otras cuestiones al estilo.Siguen los datos de las tres 煤ltimas secas, incluyendo algunos comentarios period铆sticos que resultan muy ilustrativos. Se da tambi茅n la relaci贸n del resto de paradas que hemos podido documentar hasta la actualidad.Domingo 17 de Marzo de 1996: El comentarista de prensa informa que se par贸 entre las cinco y las seis de la tarde, saliendo de bares y casas los vecinos del lugar para asistir al espect谩culo y hacer acopio de truchas que se quedaban en seco sobre las piedras. A las seis de la tarde el agua brot贸 de nuevo, recuperando el gran caudal que llevaba anteriormente, muy crecida, lo mismo que el Saja. Catalogada como Punto de Inter茅s Geol贸gico (L.C., 1996).28 de Octubre de 1995: La Fuentona estuvo parada entre las once y cuarto y las 12 de la ma帽ana (L.C., 1996).VIERNES, 20 de Septiembre de 1991. La prensa local recogi贸 la noticia, que por lo escueta y los datos que aporta, reproducimos a continuaci贸n."El flujo de La Fuentona de Ruente qued贸 bruscamente interrumpido en la tarde de ayer por espacio de dos horas, tras lo cual se reanud贸 normalmente. Este hecho geol贸gico, que pudiera deberse a la existencia de un sistema sif贸nico en la cueva donde nace el manantial, nose registraba desde enero de 1970. De haberse prolongado m谩s de cinco horas este extra帽o fen贸meno, por el que queda seco el cauce de la Fuentona, los municipios de Cabez贸n de la Sal y Ruente hubieran quedado sin suministro de agua potable, dado que sus redes de captaci贸n est谩n conectadas a este manantial.A las 15.30 horas de ayer, los vecinos de Ruente pudieron comprobar una imagen de laFuentona que no se produc铆a desde hace 21 a帽os. El repentino corte del flujo de agua, levant贸 una inusitada espectaci贸n entre los habitantes de esta localidad. Hasta que a las 17.30 horas novolvi贸 a salir el agua de la Cueva de la Fuentona, aparecieron en el cauce completamente seco del manantial unas 30 truchas muertas por asfixia.Algunos vecinos penetraron en la cavidad de la Fuentona para intentar averiguar lascausas de esta repentina sequedad. La propietaria del restaurante La Nogalea se帽al贸 que "es unfen贸meno c铆clico que ning煤n ge贸logo sabe a ciencia cierta por qu茅 se produce". Minutos antesde brotar de nuevo el flujo de agua, una de las personas que se adentraron en la cueva dijo a losvecinos: "Suena como si quisiera volver a salir otra vez".Catalogada como punto de Inter茅s Geol贸gico en el Instituto Nacional del IGME, la Fuentona de Ruente es una surgencia natural por la que desagua un karst subterr谩neo desarrollado en rocas carbonatadas de edad jur谩sica." (DE LA PE脩A, 1991).PARADAS PREVIASMartes, 26 de Septiembre de 1978. Hacia la 01 H de la madrugada el ruido de la toma de aguas alert贸 a los vecinos de una parada que dur贸 unos 20 minutos (Informaci贸n oral).Mi茅rcoles, 28 de Abril de 1971. Por casualidad, un vecino detecta la parada a las 02 AM. Semantiene parada m谩s de tres horas (SIERRA, 1971)Martes, 28 de Abril de 1970. Parada de treinta minutos (LEON GARCIA y GONZALEZ CALDERON, 1973), (GONZALEZ BEDOYA, 1971).Martes, 20 de Enero de 1970. Se para a las 8,30 AM durante cinco horas, con gran caudal, estimado en 2000 l/s (LEON GARCIA y GONZALEZ CALDERON, 1973), (ALERTA, 1970).1950. Se recuerda que este a帽o se qued贸 seco el sector difuso del manantial (Noticia oral).1936. Primera de las paradas recordadas entre los vecinos actuales de Ruente (Noticia oral). 

Menciones Historicas y Estudios Sobre la Fuentona: 1845-50. El diccionario de Madoz recoge, en el ep铆grafe Ruente, que en este pueblo "... correnlas aguas de un arroyo que se forma de las de una fuente que nace en la poblaci贸n con talabundancia que sin dificultad supera a las que dan origen al caudaloso Ebro; esta fuente tienela particularidad de secarse por per铆odos de 1/2. 1 贸 2 horas, volviendo luego a brotar con lamisma fuerza de ordinario." (MADOZ, 1845-50).1864. Amalio Maestre recoge la cita de la Fuentona, a la que describe como "...una fuente de esquisita calidad y sumamente abundante que tiene adem谩s la particularidad de serintermitente; fen贸meno que se tiene observado desde una antig眉edad muy remota." (MAESTRE,1864).1867. Manuel Assas, conocedor de varias fuentes intermitentes, algunas de ellas pr贸ximas ayacimientos romanos, se inclina por la Fuentona de Ruente a la hora de atribuirles las Fontes Tamarici descritas por Plinio (ASSAS, 1867).1962. Se publican las excavaciones realizadas en Velilla de Guardo (Palencia) en las que los autores atribuyen a la fuente de La Reana las Fuentes Tam谩ricas que desde antiguo algunos eruditos hab铆an atribuido a La Fuentona de Ruente (GARCIA BELLIDO y FERNANDEZ DEAVILES, 1962). No obstante, la lectura de este trabajo indica que parten del apriorismo desuponer que el nombre de Tam谩ricas lo adquir铆a la fuente de La Reana por encontrarse dentro delterritorio de los tam谩ricos, no contemplando la posibilidad, entre otras, por ejemplo, de que elt茅rmino "tamarici" sea un top贸nimo gen茅rico que corresponda precisamente a un car谩cterintermitente de las fuentes. De hecho hay documentadas otras fuentes intermitentes en territorio espa帽ol; la de Tamarit coincide que adem谩s de ser intermitente la acompa帽a un nombre de ra铆z coincidente con Tam谩ricas -top贸nimo muy sugestivo, pues no es probable la mera casualidad-;hay otras en Fr铆as, la citada de La Reana y la Fuentona de Ruente. A la luz de los estudios realizados por los arque贸logos no es aceptable la atribuci贸n incondicional de la Reana a las Fuentes Tam谩ricas, ni por su descripci贸n ni por los indicios arqueol贸gicos; se ha utilizado unsilogismo demasiado simplificado y sin ninguna discusi贸n cr铆tica, a pesar de la autoridad de los excavadores .1968. Al parecer, hacia este a帽o realiz贸 tinciones la empresa Sniace en el r铆o Saja y pudieron serdetectadas sus trazas en la Fuentona. El autor de la informaci贸n establece una relaci贸n entre la aparici贸n de los trazadores y que el grueso del caudal proceda del Saja, hecho que no concuerdacon las observaciones y mediciones realizadas en otros casos ni con las respuestas directas dadaspor los t茅cnicos de Sniace (RUIZ TAMES, 1985).1969. Estudio geol贸gico de la hoja 1:50.000 N潞 57, (Cabez贸n de la Sal) del IGME, que corresponde al Valle de Cabu茅rniga (SANCHEZ ALONSO et alii, 1969).1972. La Secci贸n de Espeleolog铆a Sautuola realiza investigaciones y bucea el sif贸n de la Fuentona: 60 m horizontales. Se publican unas notas geol贸gicas sobre el origen de La Fuentona(LEON GARCIA y GOMEZ CALDERON, 1973).1977. El Kendall Caving Club bucea de nuevo la cavidad, aproximadamente dentro de los l铆mites explorados anteriormente por la SESS (KENDALL CAVING CLUB, 1978).1978-1981. Revisi贸n de campo e investigaciones del autor. Se testean las caracter铆sticas(temperaturas, oscilaciones de caudal, r茅gimen de turbidez) del R铆o Saja y de la Fuentona,llegando a la conclusi贸n de que las aguas de ambos caudales no concuerdan en la mayor parte de las situaciones; ello contradice abiertamente el tradicional origen atribuido simplemente a las aguas de la Fuentona en un sumidero del Saja; sin negar que 茅ste alimente parcialmente el nivelfre谩tico del valle, debe haber otros or铆genes adicionales importantes (FERNANDEZ ACEBO,1986). Las indagaciones realizadas cerca de Sniace, que hab铆a realizado aforos y estudios, no nosaportaron ning煤n dato sobre la Fuentona, sigilo incomprensible si no fuera porque obten铆an aguapara la factor铆a y hab铆a demanda de agua potable en la comarca. Tampoco a los an谩lisis qu铆micos y bacteriol贸gicos, que consultamos en Diputaci贸n, daban abundantes nitritos y coliformes y declaraban no potable al agua de La Fuentona, se les atribuy贸 excesiva credibilidad al no conocerlos pormenores de la toma de muestras y sabiendo de otros casos en que manantiales con fuerte contaminaci贸n biol贸gica hab铆an sido declarados potables por la conveniencia “pol铆tica” derealizar las obras de captaci贸n en determinado lugar y no en otro.1984: Debido al ruinoso estado de las instalaciones del nacimiento del manantial, tras realizarselos estudios de 1978-1981 se emite informe al Ayuntamiento de Ruente sugiriendo la recuperaci贸n est茅tica del entorno, que ser铆a abordado en a帽os posteriores (FERNANDEZ ACEBO, 1984).1985. En Octubre, se lleva a cabo desde la SESS y un equipo de colaboradores santanderinos un nuevo buceo de La Fuentona, avanzando verticalmente un reconocimiento que se concluye porlas cuchillas de las paredes y la angostura de la galer铆a tras unos sesenta metros horizontales y una decena escasa en profundidad (S.E.S.S., 1985).En el mes de diciembre varias notas en la prensa se refieren a que los estudios realizados(unas pruebas colorim茅tricas realizadas semanas antes y otras de 1968) apuntan a que el agua de la Fuentona proceder铆a del Saja (RUIZ TAMES, 1985), (CAMPUZANO, 1985).No obstante, es necesario aclarar que, por un lado, los t茅cnicos de Sniace no afirmaron talextremo en su momento cuando el autor indagaba esos extremos y que, por otro, como se ha dicho, la diferencia de temperaturas entre la Fuentona y el Saja no concuerda con la que la inercia de la trayectoria subterr谩nea habr铆a de condicionar.1986. En el mes de Diciembre, con m谩s recursos t茅cnicos, el equipo coordinado desde la SESS aborda un nuevo intento y los mismos buceadores realizan una inmersi贸n desde el final del tramoa茅reo ya conocido. Tampoco se avanz贸 en profundidad m谩s all谩 de cotas anteriores. Sin plano realizado de la cavidad y sin que los buceadores desarrollaran una descripci贸n minuciosa de lo explorado o alg煤n reportaje fotogr谩fico, puede decirse que tras cuatro inmersiones el estado del conocimiento morfol贸gico de la cavidad se mantiene en la misma situaci贸n que en la primera,realizada en 1971 (FERNANDEZ ACEBO, 1986).

Referencias
1.-Cuadernos de Espeleologia 7
Santander 1973

2.-Boletin Cantabro de Espeleologia 7
Edita: Federacion Cantabra de Espeleologia
Santander 1986.

3.-Boletin Cantabro de Espeleologia 13
Edita: Federacion Cantabra de Espeleologia
Santander 1997.