domingo, 15 de diciembre de 2019

La Cuéva del Mar (C. de la Garma o del Calobro)



Historia: El nombre de Cueva del Mar le viene de la creencia, extendida en la zona, de que no tiene fondo y que llegahasta el mar, distante seis kilómetros en 
linea recta hasta la costa de Galizano.
Esta cueva fue visitada por la S.E. S.S. en agosto de 1962, conocida en la zona. Fue utilizada como refugio durante la guerra civil de 1936. 

También es conocida como cueva de la Garma o cueva del Calobro. La cueva  ha sido visitada en numerosas ocasiones por J. Colongues, R. Hernandez, T. Palacios, F. Canales, etc. Fue topografia el 20-8-75 por A. Pintó y M. Madrazo .

Situación: Se encuentra en Omoño (Ribamontán al Monte), en el monte Calobro. 

Para llegar a ella se puede tomar un camino de carros que hay en la curva del km. 9 de la carretera de Meruelo a Villaverde de Pontones. Este camino discurre a media ladera en dirección oeste entre la maleza del monte bajo, siguiéndole unos 200 m., encontramos la cueva a la derecha del camino a 7 m., entre la maleza al pie de un escarpe.

Descripción: La cueva tiene un desarrollo horizontal de 170 m.; la boca es de ámbito descendente.  A continuación encontramos una bifurcación con ramal ascendente al piso medio y descendente al piso inferior.

Siguiendo la rampa pedregosa del piso inferior, que es el mas frecuentado, llegamos al nivel más bajo, donde hay una cata excavada en el canchal. 

Desde aqui seguimos el ramal ascendente del piso inferior por un sendero tallado en el barro y coladas, enmarcado por el apilamiento de los materiales obtenidos al tallar peldaños; a los veinte metros se acaba este ramal.

El piso medio es de dificil acceso. Desde la anteriormente citada bifurcacion subimos la rampa y unas decenas de metros despues nos corta el paso una sima.

Se puede acceder al piso medio escalando la pared del piso inferior en su ramal ascendante.

Este piso medio presenta en su primer sector abundancia de coladas. En la zona media fuertes huellas de erosión y desdoblamiento vertical a dos niveles en zig-zag. También se aprecian importantes fenomenos de condensación de agua, que llega a resbalar por las paredes, dejando regueros sobre ellas. 

En la zona final, de abundantes fenómenos reconstructivos y clásticos tenemos la conexión con el piso inferior y la chimenea de acceso al piso superior. A éste se llega superando una chimenea. Este piso es de corto desarrollo, techo bajo y suelo de coladas.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982.

viernes, 15 de noviembre de 2019

Cueva de la Hacina (Ribamontan al Mar)


Cueva de la Hacina Se halla situada en el Poljé de El Calobro.

Una boca en ojiva de 2x3 m.baja en rampa hasta el enrejado de estrechas y altas galerias de 1x8 m. Por las que serpentean. un riachuelo. Este enrejado ocupa tres niveles, con diferencias de altura de hasta 12 m; existen aquí chimeneas obstruidas por bloque y derrubios. Se observa una alternancia de cslizas compactas, en la zona alta,  con otras más arcillosas y brechoides en la baja. Hay indicios de un periodo de colmatacion seguido de otro de Limpieza: huellas de erosión (marmi tas) a media altura colmatadas por colubiones de arcilla y caliza.

En la zona central de la cueva, el rio abandona el laberinto y  forma una galeria que será el eje del resto de la cueva, alta y estrecha, enforma de ocho, con restos de aluvión en la fase alta; las juntas de diaclasa originan aqui laterales de escasos desarrollo , abundando en ellas los desprendimientos de bloques y fugas en profundidad.

De esta galeria parten un nivel alto y otro bajo a la al tura de La chimenea que corta estructura de la cueva.

La cueva de la Hacina es el drenaje de la uvala del poljèe del Calobro en que se halla, recogiendo además otras aportaciones del campo de dolinas suprayacente. Apenas hay femómenos reconstructivos y abundan las huellas de antiguas colmataciones.

Referencia
Santander 1982
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología

martes, 15 de octubre de 2019

Torca del Palomar (Ruiloba)

Es la tercera cavidad del Sistema de Concha. Se accede a ella a través de un pequeno pozo formado por hundimiento.Consta de una única galería, fosil, de trazado sinuoso, orientada de norte a sur. Su desarrollo es de 250 m. Su morfologia interna aparece presidida por los fenómeno de reconstrucción. representados por abundantes coladas y estalactitas que se encuentran diseminadas en toda su longitud. Hacia la mitad del conducto hay una fuga en profundidad impenetrable, salvo en caso de desobstrucción.

En su fondo se iniciaba una galeria descendente no explorada. con una orientacion general noroeste.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982

sábado, 28 de septiembre de 2019

Sistema de la Cueva del Agua (Oreña, Alfoz de Lloredo)


Todo este sistema se encuentra en los materiales que ya describíamos en el estudio del Chaparral. Como recordatorio podemos resumir que se trata de materiales del Albiense Medio a Superior, representados por calizas y calcarenitas microcristalinas y cristalinas, estratificadas en bancos de 0,5 a 1 m. Este nivel tiene una potencia que oscila entre 30 y 40 m. y reposa sobre otro impermeable de arcillas, limos y areniscas del Albiense Inferior de entre 45 y 65 m. de potencia. Bajo éste encontramos los materiales del Gargasiense-Clansayense formados por calizas intensamente dolomitizadas. Sobre el Albiense Superior encontramos arenas y limos del Cenomaniense Inferior con una potencia de entre 60 y 80 m. Estos materiales afloran en este sector formando bandas de dirección aproximada SO-NE. El estrato en que se abre la Cueva del Agua presenta un buzamiento al SE de 28°. Los demás estratos buzan también al SE, pero su ubicación en el flanco de un sinclinal hace que su buzamiento varíe desde 31° para el Gargasiense-Clansayense en el pueblo de Oreña hasta 18° para el Cenomaniense en el desvío a Ubiarco de la carretera de Santillana a Oreña. (I.G.M.E. 1.986).


En el sector en estudio, las calizas del Albiense Medio a Superior, afloran en el flanco norte del cordal que separa los terrenos de Oreña (Alfoz de Lloredo). La parte superior de este cordal, que tiene la misma dirección que los estratos referidos, está formada por los materiales impermeables del Cenomaniense, y desciende hacia el norte en pendiente suave. A continuación, en la ladera norte encontramos las calizas del Albiense. En la zona de contacto entre estos materiales las aguas que proceden del nivel de limos se infiltran en las calizas y junto con las de lluvia que caen directamente sobre aquellas han dado origen a una gran cantidad de dolinas. El borde septentrional de las calizas, al que ya no llega el agua de escorrentía, tiene muchas menos forinas de disolución, y se mantiene a cotas más elevadas. Por tanto el afloramiento calcáreo aparece en la zona de contacto como una superficie ligeramente más hundida que el terreno circundante de la que el agua no puede salir por superficie. A continuación, siguiendo hacia el norte, están los limos del Albiense Inferior, que no aportan nada de agua al sistema, ya que la pendiente dirige las escorrentías hacia las calizas del Gargasiense - Clansayense, en las que se infiltran por diversos sumideros. Estos limos, sm embargo, sirven de lecho impermeable a las calizas en que se abre la Cueva del Agua, y por la dirección y pendiente de su buzamiento, son los responsables de que todo el sistema de la Cueva del Agua tienda a evolucionar desplazándose hacia el SE a medida que se desarrolla en profundidad.


Queda pues claro que los aportes que llegan al sistema en estudio proceden en su totalidad de los campos de dolinas que se encuentran sobre la cueva, y que estos campos recogen tanto la lluvia caída directamente sobre las calizas, como la que llega por escorrentía de los limos situados sobre aquellas.

El encajonamiento de las calizas entre estratos impermeables, y la inclinación de la estratificación en la zona (28°) obligan a su vez a todos los aportes a converger en un caudal único, que es el río permanente del sistema, parte del cual surge por la boca llamada "Cueva del Agua". Este río ha circulado en el pasado por niveles superiores  que constituyen lo que llamamos, un tanto incorrectamente, pisos fósiles del sistema. Estos aparecen muy concrecionados y ya casi inactivos. Dada la inclinación de la estratificación, como ya hemos señalado, el agua al profundizar se desplaza hacia el SE, y cada piso se encuentra desplazado con respecto al anterior, y no en su vertical.


Actualmente, el piso activo accesible sufre pérdidas de caudal por diversos sumideros situados a lo largo de su recorrido, que alimentan un nivel inferior en desarrollo, totalmente inaccesible para nosotros. Este nivel aún debe tener una capacidad de drenaje pequeña, y por ello, una parte de las aguas siguen circulando por la galería activa que podemos recorrer. Esta galería, como sus "antepasadas" ya inactivas se desarrolla paralela a la dirección de los estratos, a favor de la confluencia de éstos con diaclasas de dirección SO-NE,' aprovechando en algunas ocasiones otras perpendiculares a éstas en tramos de corto recorrido.

Las fracturas por las que avanza el cauce observable terminan por cortar la ladera del monte debido a la presencia de una valleja situada enfrente del pueblo de Oreña.


Referencias 
1.-José Luis Alonso Sánchez(2020): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2010 a 2020.

2.-Boletín Cántabro de Espeleología 13, 1997.

jueves, 15 de agosto de 2019

Cueva del Juanin (Ruiloba)


Se encuentra situada por encima de la cueva de Rupicos.

Abierta en el limite de un prado ubicado por encima de Rupicos, su boca se encontraba tapada por diversos bloques, que fueron removidos por Emilio Muñoz y otros miembros del C. A.E.A.P. , a los que debemos la noticia de la localización.

La cueva es una cavidad descendente, con un conducto estrecho abierto en favor del buzamiento de los estratos calcáreos . En su primer tramo, la galería presenta abundantes columnillas y formaciones litogénicas que obstaculizan el recorrido. La última partee de la cueva es de morfologia diferente, con predominio de los bloques y acumulaciones de arcilla de decalcificación, tanto en el suelo como en  las paredes. El de sarrollo de la cueva es muy pequeno, unos 26 m. en total.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 3
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1982

viernes, 26 de julio de 2019

Avance al Catalogo de Cavidades de Alfoz de Lloredo (II)


Este catalogo pretende ser el segundo de una serie de publicaciones cuyo objetivo es ir dando a conocer y actualizar la información de los catálogos ya existentes del Término municipal de Alfoz de Lloredo, Publicando las cavidades ya conocidas y las nuevas, fruto de las exploraciones en el municipio. En el año 2009 se catalogaron un total de 104 cavidades, en la base de datos de la Federación Cántabra de Espeleología.

Información procedente de los Cuadernos de Espeleología,  Boletín Cántabro de Espeleología y otras publicaciones.

Relación de Cavidades

22.Hoyos 0
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 44 m.

23.Hoyos
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 45 m.

24.Hoyos II
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 64 m.

25.Hoyos III
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 64 m.

26.Hoyos IV
Localización: Oreña
Otros nombres: O de la Ojancana
Tipo: Cueva
Altitud: 56 m.

27.Hoyos V
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 50 m.

28.Hoyos VII
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 42 m.

29.Hoyos VIII
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 40 m.

30.Cuesta
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 53 m.

31.Cueva del Cueto Rubio I
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 75 m.

32.Cueva del Cueto Rubio II
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 80 m.

33.HO-01
Localización: Oreña
Tipo: Torca
Altitud: 55 m.

34.HO-02
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 70 m.

35.HO-03
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 71 m.

36.HO-04
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 79 m.

37.HO-05
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 78 m.

38.Cachirula I
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 21 m.

39.Cachirula II
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 27 m.

40.Cualventi
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 82 m.

41.Enmedio
Localización: Oreña
Tipo: Cueva
Altitud: 80 m.

42.Cueva de la Torre
Localización: Ciguenza
Tipo: Cueva
Altitud: 35 m.

Referencias 
1.-José Luis Alonso Sánchez(2020): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2010 a 2020.

2. Boletín Cántabro de Espeleología 12            Federación Cántabra de Espeleología 1996.

3. Boletín Cántabro de Espeleología 9                Federación Cántabra de Espeleología 1993.

4. Boletín Cántabro de Espeleología 8                Federación Cántabra de Espeleología 1985.

Catálogos
Avance al Catalogo de Cavidades de Alfoz de Lloredo (I)


viernes, 14 de junio de 2019

El Pozo Cuadrangular (Arredondo)


Sinonimos: Pozo Castin
Lugar: Peña Lavalle
Desnivel: -217 m.

Philippe Morverand

Descripción: Esta sima habia sido ya descendida por espeleólogos del S.E.G. del E.R.E., del S.I.S de Tarrasa y del Espeleo Clud de Gracia, en abril de 1979. La nueva topografia que presentamos da un desnives algo más pequeño de esta cavidad (-224 mts. segun los grupos catalanes).

Se trata de una sima muy vertical que se puede considerar como dos pozos de 130 y 76 mts. respectivamente, aunque las piedras que caen desde la boca bajan al mismo fondo. El primer pozo empieza a -10 mts. y es espléndido en su primer tramo. Luego se vuelve estrecho y se convierte en un canalillo muy expuesto a las caidas de piedras, resultando peligroso el bajarlo. Sin embargo, la fuerte corriente de aire que se aprecia en el fondo, deberia incitar a un club de la región de Santander a forzar el paso, ensanchando el trechamiento hasta donde actualmente se ha explorado la sima.

Referencias
1 Boletín Cántabro de Espeleología 7
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1986

2. Jose Leon Garcia. Cantabria Subterranea, Catalogo de las grandes cavidades 
Santander 1997.

domingo, 12 de mayo de 2019

Larra. Cabeceras del Río San Jorge


Grupo de Espeleologia IPV.
Club Montañero Estella.
Año: 1982 Navarra
Paginas: 118
Idioma: Castellano

Introducción

La tierra es una fuente incesante de luz y misterio. En ella y desde los albores de lostiempos, la naturaleza ha encontrado el aposento en el que desarrollar sus criaturas arropada por la benéfica influencia de la luz, que todo lo invade.

Sin embargo, existe un mundo oscuro e infinito en el que la luz deja paso a la tiniebla y la vida cobra otra dimensión. Es el mundo subterráneo de las grandes cavidades de las tierra. Cavernas, simas y demás lugares donde la tiniebla arroja su manto y donde el infinito abarca toda su extensión, han sido desde la antiguedad, y lo son aún en nuestros dias, lugares ocultos e inaccesibles rodeados de un halo misterioso y proscrito que ha impedido a los hombres un conocimiento profundo de las riquezas que en ellas se esconden.

Desde la aparición del hombre hasta lo que hoy podemos abarcar con el término espeleologia, las cuevas y demás cavidades subterráneas han experimentado distintos atractivos en función de las necesidades y culturas que con el paso de los tiempos le han correspondido. Asi, en ellas se han dado cita el refugio y el hogar frente a las inclemencias, la veneración por lo desconocido y oculto, el rito a los dioses y fuerzas del más allá, el culto a los muertos, la superstición, ... y el simple miedo ante la espesa negrura que rodea todo su universo. Como regla general, ha sido esta negrura, este desconocimiento acerca de lo que la gruta oculta, lo que ha movido la mayoria de las interpretaciones fantásticas que se han sucedido en torno a ella y que, si bien no es para tanto, algo tiene que explica la deformaciónambiental y temporal a la que se han visto sometidas durante siglos.

Traspasar el umbral de una gruta y penetrar en la densa oscuridad que metros más adelante invade a quien en ella se aventura, encontrarse con la pura entraña de la tierra y de los tiempos, el silencio que durante años ha flotado entre sus paredes y la densa oscuridad que anima sus desnudas galerías y estrecheces es situarse en pocos segundos en un espacio en el que se distorsionan formas y sonidos, espacios y tiempos.

Fue entre estas paredes que ahora nos acogen donde el hombre prehistórico buscó refugio y abrigo frente a sus enemigos, frente a una climatologia adversa que le impedia vivir eel exterior. En su seno encontró resguardo contra el frio, en la intimidad de sus galerias practicó sus ritos y creencias, y en sus profundas . solemnes salas halló lugar para sus muertos.

Al mejorar las condiciones atmosféricas del exterior que habian mantenido a nuestroos arcanos arropados por los cálidos muros de lo que hasta entonces habia sido su refugio, el hombre abandona las cavernas a la búsqueda de un hogar que responda a las necesidades que se le plantean. Pero si bien el hombre abandona estos recintos, su espiritu queda en éllas desde entonces aprovechando el entorno mágico y protector que la oscuridad y quietud de la entraña le proporcionan, unas veces disfrazado de mito, otras como cubil inaccesible desde donde los dioses mantienen su poder y temeridad. En estos lugares sacros einaccesibles para los mortales se venera eimplora a sus moradores, ocultos y silenciosos. Nunca vistos pero siempre respetados, cuentancon un poderoso aliado que los mantiene ajenosa toda injerencia extraña: viven en el reino de lanoche, sumidos en una oscuridad infinita yespesa que mantiene alejados a los hombres. Solamente algunos animalesc encuentran en este espacio las condiciones como para mantenerse en una apacible subsistencia. Pero estos son los menores y los menos. Para el resto de las criaturas, la cueva, la noche sin umbral, permanece inaccesible y misteriosa.

El paso de los tiempos y culturas va a hacer de estos lugares, desconocidos y misteriosos, altar de sus leyendas y supersticiones, de sus

Cuentos y tradiciones en los que la imaginación y la fantasia daban cabida a los más extraños, hermosos y horribles seres que en ellas, moraban. Si la oscuridad necesita de muy poco para que su umbral sea la barrera ante la que caigan los más intrépidos héroes, nuestrosantepasados se encargaron de adornarla con toda una serie de relatos fantásticos y macabrosen los que el más allá cobraba acta de existencia en contraposición con el espacio exterior vivente. Estas y otras razones son motivos más que suficientes como para que un pesado velo de misterio y prohibición se cerniese en torno a estos lugares.

Sin embargo, en los albores de este siglo las cuevas van a dejar de ser un recinto mágico preñado de misterios para dar paso ainterpretaciones menos mágicas y más racionales. No habia porqué oponer a la vida en la corteza terrestre un mundo extraño y

misterioso, innaccesible a cualquier mortal. En su entraña pueden encontrarse las respuestas a muchos interrogantes que la humanidad tenia planteados. Son los Martel, Casteret, ... que dan paso a una nueva ciencia, la espeleologia, en sus comienzos de la mano de la arqueologia, después de la geologia, hidrologia, y ahora de la biologia.

Pero, ¿qué poderoso impulso hace que nos introduzcamos en las cuevas y simas, bajemos por sus pozos y trepemos por sus chimeneas, nademos en sus tranquilas aguas y nos arrastremos por sus angostos meandros devafiladas aristas, corramos por sus galerias, disfrutemos de sus dimensiones? No está muy claro cual es el poderoso acicate que mueve a pasar miseria cuando conoces de antemano tu falta de masoquismo. Al interés meramente deportivo del descenso, la exploración y el disfrute de lo descubierto hay que sumar otra serie de factores que nos empujan hacia las simas: lo desconocido, lo inexplorado, el interés por llegar alli donde pocos han estado, son los resortes que ponen en funcionamiento el mecanismo mediante el que te vas a mover una vez dentro de la cavidad. ¿0 hay algo más?.

Están ya lejos y pertenecen al recuerdo las primeras incursiones a las cavidades de la corteza terrestre. Con los ojos bien abiertos, una luz mortecina y un escalofrio que subey baja por la espalda, nos vamos adentrando en la cueva. Una nueva dimensión se presenta ante nuestros ojos que, misteriosa y atrayente, nos envuelve en su espeso manto. A la pura pasión por descubrir y conocer se va uniendo una faceta deportiva. Más tarde, no se trata sólo de bajar; comienzas a sacar datos de galerias, pozos ydemás formas interiores, aspectos morfológicos, desarrollos; trazas topografias, recoges muestras, coloras sus aguas para conocer sus direcciones y distancias,.. Una vez dentro de ellas no basta con el disfrute y contemplación de las formas y trazados que tenemos ante nuestros ojos, pues el recuerdo es efimero y las satisfaciones emocionales tan pasajeras commo el veloz transcurrir de las aguas en su interior.

Los datos, las anotaciones y croquis pasan a ser una constante del espeleôlogo cada vez que se introduce en éste o aquél agujero, la predisposición cambia y el interés por éste oaquél punto de la sima se concreta en losplanos topográficos de cara a un posteriorestudio.

Y es asi como, años tras año, de la más pura y cándida pasión por las simas, hemos llegado a lo que hoy constituye nuestra actividad y el objeto de esta publicación. Bien es cierto que muchos de los datos y su interpretación concreta se salen de nuestras posibilidades tanto como de nuestro interés. No es nuestro ámbito, no somos expertos ni lo pretendemos.

Asumimos sin mayores problemas el papel quue de cara a los estudios acerca del comportamiento de las aguas subterráneas nos corresponde, pues entendemos que una colaboración entre espeleólogos y expertos es necesaria de cara a solucionar muchas de las incógnitas que en este momento se tienenplanteadas en materia espeleológica.

Y con este ánimo publicamos hoy lo que han sido nuestros trabajos en Larra durante estos diez ltimos años. Bien es cierto que la idea de la publicación ha surgido en el último momento, pues las aventuras editoriales constituyen un campo inexplorado en el que nos ha sido necesario lanzarnos al vacio. Pero no todo iba a ser aventura. A nuestro favor contaban una zona Como Larra, con un macizo que ha centrado el interés y los estudios en los ültimos años y en el que se han dado cita grupos de todas las partes que nos han puesto en contacto con el palpitar de lá espeleologia más allá de nuestra propia experiencia. Contábamos también con el ánimo que nuestros compañeros del Club Montañero de Estella nos han dado para seguir adelante, que no ha sido poco. Ellos han sido los que en última instancia han hecho posible esta publicación al asumir el riesgo económico que estos escarceos llevan consigo.

Y poco más que añadir salvo ponernos asalvo de herejes y hortodoxos, pues lo que aqui se presenta no es un estudio acabado y pulido acerca de una zona como Larra, tan inmensa como interesante. Si hemos limitado el estudio a unos marcos reducidos, ha sido por aportar algo útil y práctico acerca del comportamiento, más o menos conocido, de lo que ha constituído nuestra actividad en el macizo durante este tiempo y, con ello, de conocimiento y aproximación a su realidad. Antes y a partir de él, todo es posible.

Estella, noviembre de 1982

viernes, 19 de abril de 2019

Torca del Caracol (San Roque de Riomiera)


Situación: Se encuentra en el Collado del Mojón o Caracol (822 m), antes de llegar al Kilometro 10 de la CA-264 de San Roque de Rio Miera a Selaya.                                          

Una pista a la izquierda de la carretera pasa entre las Peñas del Mojón (856 m) y el Caracol (898 m) en dirección a los Picones de Sopeña, desde un refugio de ganado parte por la izquierda un sendero que asciende hacia unos afloramientos calizos, la torca se encuentra en el más alto sin llegar a la cumbre del Caracol.
                                                              
Descripción: Una rampa descendente nos sitúa en la cabecera del pozo de -11 metros, equipado con una cabecera de 2 spits, una vez en la base del pozo nos encontramos en una pequeña salita cubierta de bloques y de gran numero de huesos animales esparcidos, en este punto tenemos dos opciones seguir por la izquierda bajando entre bloques, llegamos a otra sala con un laminador de techo bajo.                                                                                                                        
A la red principal de galerías se accede por la derecha subiendo por una galería alta, después de hacer una fácil trepada, a los pocos metros llegamos a un resalte de -10 metros,  a la derecha comienza una galería desfondada con algunos pozos los cuales se comunican con la sala principal.                                                                                                                    
El resalte de -10 metros, es la mejor opción para descender a la sala principal, los cuatro primeros metros se pueden destrepar sin problemas  hasta llegar a una cabecera compuesta de un anclaje inviolable y un puente de roca, una vez en la sala nos encontramos dos zonas, a la derecha dos sumideros y dos galerías una de ellas  termina en una chimenea y la otra comienza en una rampa ascendente seguida de una galería de pequeñas dimensiones por donde se aprecia una corriente de aire y un curso de agua, esta termina colmatada a los 26 metros. Por la zona de la izquierda nos encontramos una zona de bloques y a un derrumbe al final. Cerca de derrumbe  situándonos en la pared izquierda podemos acceder entre bloques a una sala de techo bajo de 5X5.60 metros, esta termina colmatada por bloques y derrumbes.

Referencia
Boletín Cántabro de Espeleología 8
Federación Cántabra de Espeleología
Santander 1987

sábado, 23 de marzo de 2019

Cueva de los Calderones-Surgencia de la Covachona (Medio Cudeyo)


Descripciónentramos por una boca de 1 m de altura por 80 cm aproximadamente de anchura. Encontramos una pequeña subida de arcilla muy resbaladiza que deberemos ascender a gatas o cuclillas ya que el techo cada vez es más bajo. Una vez arriba encontraremos un pequeño plano en el cual observaremos una entrada (no accesible) a la derecha y a la izquierda un pequeño agujero de unos 40 cm. por el que deberemos bajar. Una vez abajo, tomaremos la única galería estrecha y muy baja, que nos conducirá dirección oeste durante unos metros hasta encontrarnos con una bajada muy pronunciada y resbaladiza en la que deberemos bajar asegurados con material de vertical. Una vez bajamos encontraremos un pozo seguido de otro con una pendiente extremadamente pronunciada (casi vertical) y que sería imposible de acceder por ellos sin rapelar. 


Estos dos pozos de 10 metros, convergen en un mismo punto parecido a un balcón a unos 3 metros del fondo de una sala bastante grande y con el fondo lleno de bloques de piedra. Una vez abajo del todo, tomamos inicialmente dirección izquierda (oeste) saltando sobre unos enormes bloques hasta llegar a un río subterráneo por el que seguimos el curso trepando por la pared durante algunos metros hasta que lo complicado del terreno y la falta de medios (neoprenos) nos impiden continuar aunque nos quedamos con las ganas de seguir. Volvemos bajo el antes mencionado “balcón” y tomamos la dirección contraria es decir, (este).Seguimos saltando entre bloques y seguimos la dirección del rió hasta llegar a un lago donde debemos abandonar la exploración, no sin antes percatarnos de que hay un rollo de cordel atado a la orilla del  lago.

Surgencia de la Covachona, nos ha sido imposible explorarla ya que en nuestra sección de espeleología, no contamos con ningún miembro que practique espeleobuceo, no obstante, según nuestras indagaciones, tenemos noticias de 1999, de la Sociedad Espeleológica Lenar (S.E.L.) se había adentrado en el interior de esta cueva sirviéndose de un cordel guía el cual, fue encontrado por nosotros al efectuar la exploración de la Cueva de los Calderones.                                                         

Referencia 
José Luis Alonso Sánchez (2010): Diario de Actividades. Asociación Deportiva Pico Tres Mares 2002 a 2009.

Macizo de Peña Cabarga (Medio Cudeyo 2003-2020)


domingo, 10 de febrero de 2019

El Sistema del Cubillo de la recta del Machorro. Una nueva cavidad en Miera (Cantabria).

El Sistema del Cubillo de la recta del Machorro. Una nueva cavidad en Miera (Cantabria).

Revista Lápiz número 28
Autor: Federación de Espeleologia Comunidad Valenciana.
Año: Noviembre 2001
Valencia
Pagina: 58
Idioma: Castellano

martes, 8 de enero de 2019

Jesús Carballo García

Jesús Carballo García (Santiago de Compostela, provincia de La Coruña, 1874 - Santander, Cantabria, 1961), también conocido como Jesús Carvallo García y Jesús Carballo Taboada, nombres que utilizó en distintas ocasiones, fue un arqueólogo que desarrolló su principal actividad en Santander (Cantabria) a lo largo de más de medio siglo.

A su llegada a Santander le fue encomendada la dirección del nuevo colegio salesiano, que se encontraba aún en construcción. Fue el promotor en Santander de una delegación pretendía que fuera espeleológica inicialmente- de la Real Sociedad Española de Historia Natural y ostentaba ser el primero en España que utilizó esta terminología para llamar a la ciencia encargada de estudiar las cavidades naturales. En una comunicación presentada en 1908 en el Primer Congreso de Naturalistas Españoles de Zaragoza afirmaba que "En España, la Espeleología pasa desapercibida, a pesar del extraordinario incremento que va tomando en el extranjero, y apenas la conocen los que estudian obras francesas o alemanas. Nuestras geologías y diccionarios universales desconocen por completo esta palabra; por primera vez sonó este año en un artículo mío, publicado a este fin en el Boletín de la Real Sociedad Española de Marzo 1908 (...) El incremento extraordinario que en estos tiempos han tomado las Ciencias Naturales, nos obligó a dividir cada una de ellas en varios ramos, a fin de especificar y profundizar más las investigaciones. Así (...) la Geología, que hace un siglo se limitaba a un conjunto de puras hipótesis, abarca hoy tan vasto campo de acción, que se vio obligada a dividirse en Paleontología, Mineralogia, Estratigrafía y después en Sismología, Oceanografía, Vulcanografía, Hidrología, etc., formando cada una de éstas una nueva ciencia con sus necesarias subdivisiones. Y ahora el estudio de las cavernas adquiere tal desarrollo, que debe forzosamente separarse independiente de su madre la Geología. No debe confundirse con ésta, porque se limita al estudio completo de las cavernas sin que investigue el mar, ni los desiertos, ni los glaciales, ni los volcanes, como hace aquella. Otros la confunden con la Prehistoria, siendo cosa muy diversa, porque ésta se ocupa tan sólo de lo concerniente al hombre, mientras que la Espeleología comprende, además de esto, el estudio de los fenómenos hidrológicos, químicos, biológicos, etc., de las cavernas".

Una de sus principales aportaciones culturales fue la creación del actual Museo Regional de Prehistoria y Arqueología de Cantabria, inaugurado en 1926. Estudió diversas cuevas y yacimientos paleolíticos, protohistóricos y romanos, y algunos yacimientos paleontológicos del Cuaternario, principalmente de Cantabria. Son destacables sus actuaciones en la cueva de El Pendo (con el doctor Blas Larín) y en la ciudad romana de Julióbriga (con la colaboración de Larín y del arqueólogo y deportista Vicente Ruiz Argilés), ambas en Cantabria.